Rutinas de pensamiento y educación emocional.

 

Este es el segundo curso escolar, en el que doy vida a  mi proyecto de desarrollo de la empatía a través de los álbumes ilustrados.

Me he encontrado con  personas que quizá tienden a  percibirlo como  un proyecto de carácter ególatra , porque piensan que sólo se piensa en la propia persona, pero eso no es cierto.

Mi álbum ilustrado se centra  en los sentimientos de una niña que sufre acoso escolar para producir empatía en su entorno. En otros álbumes se trabaja la empatía desde el respeto por la libertad, debemos poder elegir una vestimenta o juguete sin atender a roles impuestos de género. Trabajamos con los niños la empatía por las personas adultas de nuestra familia, respetado como se sienten y la importancia de compartir las  tareas domésticas. La empatía por los distintos tipos de familia que existen y que la sociedad no acaba de terminar de respetar. La empatía por los animales y el cuidado de su entorno... 

A veces, la gente no es  consciente del gran potencial intrínseco de los álbumes ilustrados en cuanto a educación emocional.

La empatía crece con el respeto, con la tolerancia y todos esos valores no son fáciles de aprender, se necesita una riqueza mental que exige no saltarse ningún paso cognitivo. Por ese motivo estoy trabajando en mi aula este año las rutinas de pensamiento.

Las rutinas de pensamiento dan visibilidad a nuestros procesos mentales , estructurándolos y organizándolos. Estos pasos dan lugar a un incremento de nuestra riqueza mental, proporcionando en nuestros alumnos un aprendizaje significativo y de calidad.

El versátil proyecto Zero y las enormes aportaciones de David Perkins son la base de la metodología que sigo en mi aula.

Con peques de 4 y 5 años estoy trabajando:

-  El panel 3, 2, 1 puente, que muestra de forma visible y rica el contraste en los proyectos entre los conocimientos previos y los nuevos.

- El panel color, símbolo, imagen, que aporta  enriquecimiento a las imágenes mentales.


- El panel Leo, observo, construyo y escribo. Un híbrido que combina  las rutinas de pensamiento y las tablillas de la pedagogía Montessori.

Esta metodología es aplicable a cualquier etapa educativa, es por ello que animo a los docentes, a  experimentar con las rutinas de pensamiento, para promover en nuestras aulas un tipo de aprendizaje motivador y de calidad. 



Comentarios